5/12/13


En la tefilá que agregamos en Janucá al rezar decimos que los griegos quisieron hacernos olvidar la Torá y los preceptos. Pero si nos fijamos bien, la frase dice "hacernos olvidar Tu Torá y Tus preceptos", o sea que a los griegos no les molestaba la Torá en si, sino el hecho de encontrar a Dios en ella.
En otras palabras, la diferencia entre la fe y el ateísmo es si el mundo esta cerrado hermeticamente o no. El ateo ve el mundo y es fascinado por él. Por la naturaleza, las leyes, la belleza, el absurdo, el humano, la vida... pero no se encuentra con un creador, un alguien, un "yo" al ver todo eso. El que tiene fe no solo ve algo, sino que ve a alguien. Ese alguien no es humano, pero tiene personalidad, tiene voluntad, tiene libertad.
Ojo, a no confundirse. No estoy diciendo que el ateo se equivoque, de hecho él tiene razón, como ya lo explique en otros articulos. La unica evidencia de la existencia de Dios es la tradicion del pueblo judio de la salida de Egipto y la entrega de la Torá. La creación no es evidencia. El ateo no acepta la historia del pueblo de Israel, por lo tanto es logico que no se encuentre con alguien al admirar el universo.

Aclaro esto porque hay gente que dice "yo estudié la naturaleza y encontré a Dios". Una frase sin sentido. El universo en sí no da evidencia alguna de que haya creador y sin la tradicion judía la logica dicta que el camino a seguir es el ateísmo.
Hay quienes se apoyan en un antiguo midrash (que está citado, sin dar credito obviamente, en el Corán). El midrash cuenta que Abraham Abinu buscaba al que manejaba el mundo. Vió las numbes que dan lluvia y dijo "de ellas depende la vida, deben ser las que dirigen el mundo", hasta que vio que a las nubes se las lleva el viento. Así siguió buscando hasta que pensó que era el sol, pero se decepcionó al ver que de noche desaparecía para darle lugar a la luna. Acá es donde viene la parte interesante del midrash, que la gente no sabe leer. La mayoría dice "entonces se dió cuenta que Dios creó todo, las nubes, el sol, etc." y de acá se apoyan para decir que de la creación se puede descubrir a Dios. Pero el midrash dice otra cosa: Abraham no conseguía respuesta y empezó a preguntarse "Será que este mundo no es manejado por nadie?", entoncés Dios se le revelo y le dijo "Yo manejo el mundo". En otras palabras, si Dios no se le revelaba, Abraham no podría haber concluido solo que hay un dios que maneja el mundo.
Pero una vez que la revelación está, una vez que el pueblo judio lleva la tradicion de que Dios busca y baja a la persona y al mundo, ENTONCES podemos encontrar a Dios en el universo. No solo podemos, es nuestro trabajo y placer. Ahora, al estudiar Torá, estamos dialogando con Dios, pues Él se invistio en ella para que nos encontremos con Él al leerla. Al hacer mitzvot, entendemos que no solo están para hacernos mas eticos y morales, sino que en la acción misma nos encontramos con Dios. Así tambien, al entrar en la psicodelia, al admirar los arboles, al acostarse a ver estrellas fugaces, podemos conocerlo a Él.
Ésto permea al mundo, a traves de la conciencia que tomamos al acercarnos a él, de Kedushá. La kedushá es el aceite, es el cohen, es lo que salvó la llama del monoteismo.
Pero ahora demos un paso adelante... el peligro de la kedushá.
Todo debe estar en balance. Solo kedushá tampoco sirve. Demasiada kedushá puede tambien romper la armonía y destruir la naturaleza, el orden, la ética y la moral. De hecho es lo que pasó, luego de que los Jashmonaim, que eran cohanim, ganaron la guerra, decidieron tomar el gobierno. El gobierno le pertenece a la tribu de Iehuda, pues son politicos. El cohén es sacerdote y al meterse en la zona de la politica, se corrompe. El reinado jasmoneo fue un reinado que se corrompió y la mayoria de su descendencia se puso nombres griegos. 
La religión, la kedushá y la gente que su alma es de sacerdote no sirve para la politica y viceversa. Cada tribu y cada alma tiene sus cualidades y meterse en el lugar del otro es peligroso. Cuando una persona que solo le importa la religion entra a la politica, es obvio y necesario que las almas mas seculares balanceen la situación.
Obviamente lo ideal sería que cada uno conozca el balance de todas las partes en su propia alma, pues todos tenemos un poco de sacerdote y un poco de secular. Talvez cuando logremos balancearnos, cada uno, podremos balancear nuestro pueblo y porque no, a todos los pueblos.
Hay kedushá en la religión y hay kedushá en la secularidad. Que podamos encontrar a Dios en ambas partes. En Uri Zohar y en Arik Einstein, en Iesh Atid y en HaBait HaIehudi.

Janucá sameaj!